Independencias

Ya no sé si soy yo que me estoy volviendo intolerante a todo aquello que creo viola mis derechos, o si el sentido común me asiste realmente a mí mientras a otros los envuelve una creciente locura colectiva que parece no tener fin y que por muy histórica que sea ya empieza a resultar intolerable.

El conflicto que se agudiza estos días en Cataluña el cual estoy casi obligada a seguir por la profesión de mi pareja, está despertando día tras día de un modo inherente, un asombro que se torna en preocupación. Preocupación por ver como se pone descarada e impunemente en peligro la democracia.

Esta que tanto esfuerzo costo conseguir, algo que al parecer no recuerdan muchos de los que tuvieron la suerte de nacer en libertad.Desde la posición social que ocupo, nunca me he pronunciado ante ningún acontecimiento político, pero sin duda tengo mis ideas y valores como cualquier persona.

Con inquietudes y que además se dedica en cuerpo y alma a ayudar a otros desde un colectivo sin ánimo de lucro que asiste a diario a personas con Parkinson, algo que me frena el ideal político, pero la gota ha colmado el vaso.

Está claro que aquí falla algo y a mí juicio se trata de una gran falta de empatía unos con otros, vamos siempre a buscar nuestro propio beneficio ,sin importar el daño colateral que ocasionemos al prójimo. Es acaso democrático exigir derechos sí para ello violas los de tu vecino?

Creo que en un país caracterizado por su enorme diversidad, es un error no haber trabajado en que nos entendiéramos y conociéramos más entre nosotros mismos y así la tolerancia entre todos sería posible.La separación de Catalunya repercute en todos los sentidos al resto de España.

Por lo tanto creo que lo lógico es que todos los españoles tuviéramos voz en la decisión. ¿Hasta cuándo durará este proceso turbador y cada vez más siniestro aprovechando que ahora se celebra Halloween?
¿Hasta cuándo seguiremos infringiendo leyes que rigen para unos sí y para otros no?

¿Hasta donde se pueden perder valores y principios conseguidos con tanto esfuerzo, en pro de la independencia de un territorio que nunca tuvo dueño?
El Creador debe de haber vuelto la cara una vez más para no ver como nos apropiamos de aquello que el tardó 6 días porque el séptimo descanso, en crear.

Ordenando al hombre al que hizo a su imagen y semejanza reproducirse y administrar de manera "legítima" su creación. Las fortalezas de una nación, de un colectivo, de una asociación, de una comunidad, recaen sobre todas las cosas en la unión entre estos, en beneficio de todos, o lo que es lo mismo, legítimamente como El ordenó

La única independencia por la que cualquier ser humano debe luchar contra cielo y tierra es aquella que por desgracia estoy viendo perder cada día a algunos de mis compañeros en Parkinson Jerez. Esa independencia que se ve atacada por una enfermedad incurable.

Que tras la silenciosa avanzadilla siempre gana la guerra por la fuerza, haciéndonos en muchos casos marionetas en manos de quién no soporta el peso de tan arrasadora batalla. Ojalá todo ésto sea muy pronto una anécdota que poder contar a mis nietos, la de Cataluña y sobre todo la del Parkinson.

Comentarios

  1. Muy profunda tu reflexión , Es sin duda el gran reto de un enfermo de pk, proveerse de fuerzas que le acompañen y la independencia no sea efímera como parece lo es de esa comunidad tan querida a pesar de algunos y donde tantos afectos tenemos andalucesy y demás pueblos de España.. Si la vida tuviera un sentido de trancesndencia tendría alguna logica la lucha de alguno por mover la mesa y tirar los vinos. Solo los que sabemos el valor de lo esencial como puede ser andar sin caerte, nos suena a una desconsideración empobrecer una sociedad por ahondar en caminos oscuros cuando La Luz que aún disfrutamos nos da suficiente para ser medianamente felices pero el hombre se empeña en complicarse la vida, una vida que solo cuando deja de serla la valoras . Enrique

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Enrique por leerme, un fuerte abrazo!

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Carta a mi hermana mayor en su 50 cumpleaños.

La Máscara.

Soltar no duele...